NO
PUEDES FIARTE DE NADIE…
Sé
que estoy sólo en esta disyuntiva. Necesito ayuda y compañía, pero sospecho de
todos los que me rodean. Mi pareja, mis amigos de la infancia, los niños con
los que me cruzo por la calle. Sé que el mal se ha extendido como una plaga. Sé
que puede acercarse a mí oculto en lo más oscuro de la mente de cualquiera y
golpearme de nuevo hasta hacer que desee poner fin a mis días.
En
las comidas con los amigos apenas entablo conversaciones con nadie, mi familia me
mira extrañada por cómo le guardo las distancias, mis vecinos creen que he enmudecido…
Pero no aguanto más, sé que no podré volver a soportarlo. Mi mente no podrá
sobrevivir a otra conversación con frases
de viejos.
Empiezo
a sospechar que están todos poseídos. Espíritus de viejos anónimos (de esos de “allá
llegaremos…”) han invadido las mentes de niños y jóvenes y han conseguido que
en cualquier instante una frase de viejo
te dé una bofetada ¡ZAS!
Miro
a mi alrededor en silencio y repaso donde me atacaron las últimas veces:
Comenté a un amigo que habían multado por corrupción a un alto cargo municipal
y con un sospechoso acento me respondió “no
es mucho dinero para un alcalde”. ¡ZAS!
Entré
al gimnasio con otro amigo y tras saludarme me comentó “¿A que no sabes quién se ha muerto?”¡ZAS!
En
un bar otro amigo me confesó “he leído
que la NASA para deshacernos de los residuos nucleares va a enviarlos al sol
para que se destruyan” ¡ZAS!
Tras
jugar la pachanga de futbol sala de los domingos por la tarde, un niño abandonó
los columpios, se acercó a mi grupo de cansados jugadores y con una expresión
impropia para alguien de su edad nos dijo “chavales,
qué bien entrenáis los domingos por la tarde…” y mientras se alejaba vi que
el niño llevaba una vara de avellano bajo el brazo ¡ZAS y en toda la boca!
Temo
estar infectado, temo que las frases de viejo ya se hayan metido en mi cabeza y
que sean una enfermedad en estado latente. Sólo espero que la agonía sea breve
y que si he de sucumbir, caiga sólo y no infecte a nadie más diciendo “dale más voz a la tele”, “cierra la luz” o “cómo habrán quedado las témporas”…
Mantened
el cuerpo sano y la mente despierta.
(Si Dios quiere...)
(Si Dios quiere...)
Pd:
Dejad un comentario si también habéis sido víctimas o testigos de estas u otras
situaciones similares.
Esta viñeta de regalo para animar el día a los que leéis por la mañana |
A todos nos ha pasado eso. Todos tenemos el tipico amigo que habla asi. En muchas ocasiones creo que yo soy ese amigo para mucha gente jajajajja
ResponderEliminarQue nunca te vea con la ruda del coche con poca presión, porque seguramente te espetare: " Gelo, esa rueda tiene poca viento!!"
ResponderEliminarCuando necesites más "frases de viejo" no dudes en pasarte por mis partidas de flor!!! A los costerones nos va mucho ese rollito jajajaja
pd: tendrias que haber acabado tu entrada con: "Mantened el cuerpo sano y la mente despierta. SI DIOS QUIERE....."
Acepto la corrección.Eres una mente brillante con tantas cosas que contar que te mereces un espacio propio...Me impresiona tu sabiduría y te agradezco que te pases por este intrascendente blog...
Eliminar